Camelos

«Una de las lecciones más tristes de la historia es ésta: si se está sometido a un engaño demasiado tiempo, se tiende a rechazar cualquier prueba de que es un engaño. Encontrar la verdad deja de interesarnos. El engaño nos ha engullido. Simplemente es demasiado doloroso reconocer, incluso ante nosotros mismos, que hemos caído en el engaño. [...] Si a veces es más fácil rechazar una prueba consistente que admitir que nos hemos equivocado, es una información sobre nosotros que vale la pena tener. [...] Los camelos, engaños, ideas poco precisas, tonterías y deseos disfrazados de hechos no están restringidos al salón de magia y al consejo ambiguo de asuntos del corazón. Lamentablemente, abundan en la vida política, social, religiosa y económica de todas las naciones».

Carl Sagan, El mundo y sus demonios. La ciencia como una luz en la oscuridad, Editorial Crítica. Barcelona 2020. Pág. 266-268